La reunión del Consejo del Salario entre los gremios,
empresas y el Gobierno nacional fracasó hoy por diferencias en el porcentaje de aumento, y ahora será el Poder
Ejecutivo el encargado de fijar el sueldo mínimo.
A mitad de año también se había frustrado y la Secretaría de
Trabajo había dado un aumento del 15,9 por ciento.
En esta oportunidad, se esperaba una definición para el
último tramo del año y los primeros meses de 2025, pero no se logró un consenso
entre las partes.
De esta forma, el Gobierno tiene un lapso de diez días para
fijar lo que será el próximo monto del Salario Mínimo Vital y Móvil en la
Argentina.
Actualmente, el sueldo mínimo en el país está en $271.571,
lo que la Confederación General del Trabajo (CGT) esperaba llevar a $572.000,
en acuerdo con las dos CTA.
Durante 2024, el salario aumentó un 74,08%, lo que significa
una pérdida del poder adquisitivo, ya que la inflación interanual está en 107%.
Por su parte, la Unión Industrial Argentina (UIA) propuso un
incremento en tramos: $278.000 en diciembre, $284.000 en enero, $290.000 en
febrero y $295.000 en marzo.
El Salario Mínimo Vital y Móvil alcanza a unos 6 millones de
trabajadores formales, pero también impacta en los informales que se rigen por
ese monto.
La reunión se llevó a cabo vía virtual y tras el fracaso de
la negociación se pasó a cuarto intermedio.
El secretario de Trabajo, Julio Cordero, deberá establecer
un nuevo piso para los salarios, tomando en consideración los argumentos de
cada sector.
Las dos CTA y la CGT, que había coordinado el pedido de
aumento, consideraron la oferta de las cámaras empresarias como
"insuficiente".
Además, se quejaron porque un incremento de ese porcentaje
no permitirá que se recupere el poder adquisitivo perdido a lo largo del año.
Las empresas argumentaron que las dificultades económicas
hacían imposible un aumento mayor.